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| Niños jugando, Oskar Kokoschka |
Es en tus huesos donde mis dedos se anclan
para evitar que la mano del aire
me levante del suelo.
Me cantas al oído cuando cuentan mis pestañas
que el miedo ha regresado
y no quiere irse del bolsillo de mi abrigo.
Sabes por qué no salgo a buscar el límite de un vuelo,
y me reparas las alas que se rompieron
en la última tormenta de rayos pálidos, hirientes.
Adivinas
que quiero que me hables
de cuando éramos niños y no temíamos
ni muerte ni principio de los días,
no existía nada que pudiera contenernos
en un frío molde de piedra.
Juntos, hiedra que siempre subía.
5 comentarios:
"Me gustaría cambiar el mundo
pero no sé que hacer".
De todas maneras no te lo dejaré a vos ¡que carga! Deberíamos ser todos linda, pensar que con un poco de cada uno se podría solucionar. Tu poema , que decirte, me ví a mi misma , a mi hermano mayor, no sé porque, será que hoy ando melancólica y el era el único que remendaba mis alitas. Ya no puedo hablar con el así es ando descosida amiga. El mundo está muy loco susi y muy triste. Por eso yo siempre aprovecho a decirte que te quiero, porque me gusta que lo sepas.
¡Quién dijo miedo!
Para eso, sería mejor
andar sin bolsillos
Y por no llevar, no llevo ni móvil
Total ¿Para qué?
Para que me den un susto
cuando menos se espera
No gracias
Saludos sin móvil ni bolsillos, sin nada, ni siquiera miedo.
Donde estás princesa de ciudad?
Espero estés de vacaciones por ahí y vengas a contar algo. Aquí llueve y tengo un Martini para compartir, con limón pero sin hielo que hace brrrrrr.
Besotes linda.
Lyl, aquí estoy. Que he tenido unos días muy liados.
Lo que has sentido es exactamente lo que he querido decir. No se trata de un hermano de sangre, pero hace tanto que nos conocemos... hemos crecido juntos, es quien me consuela porque es quien mejor me conoce. Y cómo se agradece.
Un Martini... y si es blanco, ya no se puede pedir más. Tengo que ahorrar, amiga, tengo que ahorrar, quiero tener contigo charlas cara a cara, copa a copa, verso a verso.
Yo también te quiero, amiga.
En ocasiones, brujo, me pasan esas cosas. Supongo que para no andar siempre por las nubes. Hay mala gente, no descubro nada nuevo. Y a veces me dan miedo, no tanto por mi, sino por todos.
¿Vas sin móvil por la vida? como yo jajaa
Abrazos, doc, y gracias por estar siempre ahí.
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