Sus
cuerpos se dividen en múltiple espera,
tan
pequeños que la fuerza es su tamaño,
mínimos
gnomos de un bosque en abismo.
Miradas todas
vidas
y asombro una sola
historia
que no sabe de dónde viene.
“¿Qué
es el abandono?”,
preguntan,
mientras saltan sobre el filo de la acera.
Cuatro
gatos diminutos gritan hambre,
un
oído abre una puerta y entran
con
la digna estampa de quien lo merece.
2 comentarios:
Hermoso!
Tan visual...
Un gusto descubrir te espacio.
Saludos.
Gracias, Adriana, saludos.
Publicar un comentario