#cookieChoiceInfo { display: none; }
Allen Ginsberg, tras leer las críticas oficiales a su poema Aullido:
"La poesía ha sido atacada por un aterrorizado hatajo de ignorantes y pelmazos que no comprenden cómo se hace, y el problema con estos cretinos es que tampoco la reconocerían si se les apareciera en mitad de la calle y se los follara a plena luz del día."

domingo, 29 de noviembre de 2015

Se viene la sombra


Se viene la sombra y gana claridad la lejanía. 

Allá, donde los ojos se dan de cabeza con un cristal de hielo, 

se encienden los cordones gris eléctrico febriles sobre montes. 

Baja calma, 

la noche, 

camina lento, 

como una modelo de esquina en un andén vacío, 

y el metro que no llega, 

y ella, de arriba abajo camina lento, 

despertando a las curvas con sus pasos lentos, 

sin prisa; aún quedan varias horas 

para buscar el rastro de las venas

que fueron soñadas por el día de ayer.









miércoles, 25 de noviembre de 2015

Desafío


En el centro, diablo transparente: 

debes tener más puntería, para que yo me vaya sin remedio. 

¿Qué quieres decir con ese gesto 

a lo Dama de las Camelias? 

Nacen las luces, triste sombra entre las dimensiones, 

dentro del silencio que abraza el movimiento cuatro 

de la cuarta puerta, 

que sigue abierta, cuando más brilla. 

Con o sin consentimiento de tus reinos inorgánicos. 

En el centro, diablo...





jueves, 19 de noviembre de 2015

Y es voluntad de lumbre


Suele rescatar luces perdidas en la carretera 

y accidentes de retaguardia; 

refugia ideas, trastiendas y malabares, 

posibilidades confundidas, ángulos materializados apenas. 

Los observa para ver por dónde lloran. 

A veces, tarda en salir el origen de las cosas, 

pero sigue mirando con ojos de búho a medianoche: 

sabe que aparece, 

si le ofrece una manzana recién caída, 

y luego, sana. 

Su casa escribe en las servilletas de todos los bares; 

es una estrella que corre por el cielo sin albergue, 

que dijo el loco caminante. 

Por estar ahora y en su sitio.










sábado, 14 de noviembre de 2015

La cosecha era el tiempo


La cosecha era el tiempo

de escuchar hojas en suelos flecos 

verde antiguo 

rueda rota en el radio octavo, 

arrastrando mástiles que serían alimento 

de la lumbre. 

Se quitó el apellido, 

como quien desprende una costra que ya no necesita. 

Vio en su lugar una piel tan blanca, 

que no hubiera sido elegante 

ponerle un nombre. 

Dejaría que sus poros buscasen qué hacer 

al abrir los labios... 

Quizá detener el llanto de

la pesadilla de un alambre, 

o traducir el núcleo germinado 

de la semilla de un roble, 

tan perfecta.










domingo, 8 de noviembre de 2015

Pero ella no estaría


No conservo personas en frascos al vacío; quise transformarlas en semilla, 

después de abrir la ventana que lleva hacia donde cuentan 

que hay tesoros parecidos al pensamiento de muchos lados.

Si las horas llenas de siglos se escuchan con el mismo espejo, 

habiendo tantos ríos que nos llaman...  

Si una idea es incapaz de suponer dónde está la frontera de la frente, 

se llena de nada el espacio absurdo del tiempo 

que arrastramos a favor de nadie. 


Desde que un día nos vimos en el agua, sin saber que nos erguíamos... 

Desde el primer paso, asombrado de su fácil nacimiento, 

se transforman los montes en arena, los huesos en lanzas contra molinos, 

el llanto en brisa y lo demás es viento 

soñando con otros aires. 


Creerían, si me vieran, que soy la misma de antes, pero ella no estaría.










lunes, 2 de noviembre de 2015

Can't Find My Way Home



Suena lejos Can't Find My Way Home redondo el humo de la hierba y yo 

medusa en cuerdas lámparas.

La noche mueve las caderas poderosas de un ciervo vagabundo 

trenza hilos de araña dice perlas de diamante 

flores agua siete velas por cada espiga 

que adorna la columna calcio.


El día se diluye en su guarida se duerme se esconde 

se hunde vertical sobre la alfombra y yo

no sé dónde está mi casa.