#cookieChoiceInfo { display: none; }
Allen Ginsberg, tras leer las críticas oficiales a su poema Aullido:
"La poesía ha sido atacada por un aterrorizado hatajo de ignorantes y pelmazos que no comprenden cómo se hace, y el problema con estos cretinos es que tampoco la reconocerían si se les apareciera en mitad de la calle y se los follara a plena luz del día."

lunes, 4 de mayo de 2015

Los huesos de la historia


Qué culpa tengo yo 

del polvo nunca enamorado de los huesos de la historia.

El pasado es un puente perdido en las hojas del árbol por el que subías 

cuando llegó la sangre. 

Creíste morir dentro del laberinto, 

que aquello era un castigo por ser ángel sin alas, 

y lloraste a una estrella rota detrás de tu lamento. 

Pero era mi frente espejo de lágrimas multiplicadas,

y no pude hacer más que lo que hice; 

fuimos esperanza y otra vez las víctimas 

del abrigo que no estaba cuando lo necesitamos.

Quisiera cuidarte, que aprendieras a olvidar el miedo a los temores sin voz, 

sin el sonido tranquilizador de la corriente arrullo del río soñando con sal, 

mineral de las transformaciones.

Más adelante, quizá. Puede que seamos, en otra vida,

encarnación en el trigo de los panes. 

Ahora no podemos defendernos.






2 comentarios:

Lyliam dijo...

Que tristeza tus letras hoy, sensación de impotencia frente a ese puente perdido que no nos deja acercar a quién amamos. Tal vez en otra vida seamos más que ahora pero yo quiero ahora susiiii. Y seguro me voy a morir esperando algo más, me gusta esperar jajajjaj. Besotes no tristes para vos. Me alegra hayas visto el video como yo, sabía que te gustaría.

susi underground dijo...

Sé que no es fácil deducirlo, pero me salió un trozo de historia de este maltratado país, una triste etapa que tu abuelo español habría sabido reconocer. Ay, Lyliam, que no terminamos de dejar atrás las maldiciones. Ellos viven en nosotros, no podemos evitarlo, ni queremos. Venga, brindemos por ellos: ¡chin-chin!