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Allen Ginsberg, tras leer las críticas oficiales a su poema Aullido:
"La poesía ha sido atacada por un aterrorizado hatajo de ignorantes y pelmazos que no comprenden cómo se hace, y el problema con estos cretinos es que tampoco la reconocerían si se les apareciera en mitad de la calle y se los follara a plena luz del día."

domingo, 27 de octubre de 2013

Pozo de siglos




Es un valle de espinas en la cabeza de los robles,
tierra yerma 
por las cruces de piernas deformes 
clavadas en el camposanto.

Las vacas miran
desde unos ojos de vidrio, 
tienen las orejas numeradas
porque las bestias que las han criado 
quieren saber qué corazón se comen.

Mal bosque rodea lindes y peñascos,
no protegen sus árboles
-asustados por la plaga-
ni de la triste Vetusta ni de la ira 
de Pascual Duarte.

Una bandera que da miedo al aire
amenaza en la plaza de la aldea:
recién planchadas sus arrugas,
sigue sacando pecho.

Interminable...




2 comentarios:

Anónimo dijo...

Por cierto que he andado por las tierras de Pancho Villa. (Algún parecido con Francois Villon debe tener). Inspeccionando obras en proyectos gubernamentales de apoyo agropecuario jajaja. Bueno he ido de invitado. Pero nada cambia, supongo que los españoles algo tienen que ver... Los cromosomas que heredaron su canibalismo de las primeras bacterias... O eran solares..?

susi underground dijo...

"Yo soy Francois, aunque no quiera,
nacido en París, de Pontoise cerca,
y en el extremo de una cuerda
sabrá mi cuello lo que mi culo pesa."

Hay que reírse hasta del culo de uno.
¿Que has andado por tierras de Pancho Villa? ¿Pero dónde vives ahora?
Es que no me cuentas nada...

Hubo una mutación en España, hace ya muchos siglos, y cierto cromosoma asesino secuestró a otro que gustaba del sol. Entonces secuestró, el asesino, también al sol, y le castigó a cegar caras, aunque no quiera. Desde entonces, todos castigados a no brillar. Pero un día llegará...