Sin sábanas, temblorosa barcaza en aguas turbias...
Rugidos mecánicos se deslizan por las bisagras de los balcones,
hélices húmedas, acuerdo entre gotas y fiebre saludable.
Un neón sobre marquesina resplandece espaldas
intercambiadas en terreno de óxido sonoro.
Dulce reposo de cocaína.
Huele a alcohol barato sobre ropas invisibles,
ganas de no estar, de ser en otro, de callar al miedo
y a las estadísticas, a la historia peinada con laca,
al futuro imaginado en negro
y a lo viejo y a las estatuas y a un presente tan feo como una habitación vacía.
El amparo apetece de los días sucios.
5 comentarios:
Me lleva de la mano del abandono, de uno mismo y todo lo que le rodea. Me lleva por horizontes perdidos, donde la esperanza se enajenó a la vuelta de una esquina cualquiera.
Me lleva al desamparo, a la soledad, al frío de un día soleado..
En momentos como éste, mucha gente se siente perdida. No encuentra su lugar porque ha sido borrado del mapa por burócratas sin conciencia.
Así es, Ana, un desamparo, a pesar de todo, rebelde a sí mismo.
Nunca estarás sola, porque hay algo invisible, tal vez ya crece como una cuerda, como ese cable submarino, cuando aún no anunciaban la fibra óptica. Pero qué hijos de perra, si yo ya vi la nodriza...
Te amo Susi... Sé que lo evades, porque parece tan etéreo... Me quedo con que me consideres... Besos siempre
Esto es para ti, mi querido Arkha:
https://www.youtube.com/watch?v=bsoiupLME-w
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