#cookieChoiceInfo { display: none; }
Allen Ginsberg, tras leer las críticas oficiales a su poema Aullido:
"La poesía ha sido atacada por un aterrorizado hatajo de ignorantes y pelmazos que no comprenden cómo se hace, y el problema con estos cretinos es que tampoco la reconocerían si se les apareciera en mitad de la calle y se los follara a plena luz del día."

domingo, 3 de junio de 2012

La mano


Un taconeo extraño

revistió el aire de un aroma

gris, húmedo y desafinado,

algo desgarrando fosas nasales como

uñas de gato loco por un sorbo de aguarrás.

La  huérfana pulsera de oro reclamaba rellenar

su espacio vacío de cante jondo,

reflejo dorado en las huesudas manos

del amo de los cambios del aire.

Mientras, el polvo del desierto tatuaba las líneas

de los ojos con una lágrima siempre apoyada

en el extremo noroccidental, según se mira

desde la boca del estómago.





No hay comentarios: