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Allen Ginsberg, tras leer las críticas oficiales a su poema Aullido:
"La poesía ha sido atacada por un aterrorizado hatajo de ignorantes y pelmazos que no comprenden cómo se hace, y el problema con estos cretinos es que tampoco la reconocerían si se les apareciera en mitad de la calle y se los follara a plena luz del día."

jueves, 1 de marzo de 2012

Los girasoles


Un jirón de indolencia descompone

el rígido calendario

y un sonido lento y primario

se desliza buscando sus bordes.

Inclinando humildemente la cabeza,

una bombilla disfraza de oro

la amplitud de la materia gris

asumiendo con sus rayos

los contornos de la quimera perfecta,

el estudio sincopado de la lejanía,

la mejor manera de ocupar los días

sin correr por la línea recta.

Y vierten sus veranos, 

ajenos a todo,

los girasoles,

calentando el frío aliento de la niebla.


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué sensación de sosiego desprende la imagen y los versos...Es como un canto a las bondades de tomarse un respiro...con ese sonido lento y primario, tan bien acompasado con el sentido de la vista...bordeando contornos y suprimiendo atajos.

Con una música pausada ni te cuento...No me haría falta diazepam.

El B. de L.

susi underground dijo...

Es tu estilo, brujo no cabe duda.
¿Te parece El bolero de Ravel?
Es pausado, pero sin dejar que te duermas.
Un abrazo, doc.