Quiero memorizar la ruta de los huesos,
ahora que recorro a oscuras y en silencio
el andamiaje físico de tus palabras serenas,
ahora que los ángulos se abren
formando una línea recta,
ahora que las curvas se adaptan a los
perfectos engranajes de la maquinaria.
No quiero ver qué parte de tu cuerpo toco
con las yemas de mi asombro en carne viva
dispuestas a no parar hasta teminar el plano
que dimensiona tu espacio de hierro.
Verte dormido es el vicio del pecado.
6 comentarios:
Un placer leerte en esta espacio. La poesía es un atentado celeste. (V:Huidobro)
Ummmmmmmm Qué pecaminosa.
Un abrazo del que pinta sueños aunque no sea yo el dormido. Que tengas buen comienzo de semana.
La poesía es el eco de la melodía del universo en el corazón de los humanos, decía Tagore.
Gracias por el regalo de tu presencia, querida Ludmi.
Más vale que a estas horas no estés dormido, doc jeje.
Gracias, brujo. Besotes.
excelente poesía
una delicia
yo también tengo ese vicio...jeje
Ana
No me extraña que tengas ese vicio.
Muchas gracias, divina ecuatoriana, por pasarte por aquí.
Un abrazo calentito, Ana.
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