Actores del cadáver: Susi, Freaky y Tommy, el franchute con más sangre en las venas que he conocido nunca.
Se nos va a las alturas estelares para seguir la búsqueda que no cesa, la que le mantiene con vida.
Queremos verte pronto, amigo.
Un abrazo sin dios ni amo.
¡Qué fiestuka de puta madre!
Todos se ponían hasta las cejas de todo, no faltaba nada, ni pan ni mujeres JAJAJA...
Hasta que llega el Papa y zarandea el aire con su sotana de un blanco indescriptible,como reminiscencias de hongos en la lengua de una vaca loca.
Seguramente enviaremos los sellos dentro de los sobres para que viajen con más privacidad de la que hay por las esquinas.
CARRÁN, CARRÁN, y que la virgencita baje del cielo con San Juan de Aznalfarache, los Santos Cocotillos y los Santos Cocotones para flotar como si fuera un overboard de ésos, pero se empezaron a inflar y tuvo que dejar la cabeza en el agua. Nadó hacia la superficie como un demente y la recogió. Una tía con bañador rojo, tipo Pamela Anderson, atravesó las arenas calientes de la playa para tirarse en plancha al mar camino de agua sobrevenida por un milagro indeciso de alguna ley natural que resurje del corazón de los astros más lejanos y más mohinos de todas las estrellas y los planetas perdidos con mala leche, la de siempre, está que te saca de quicio, que te deja todo enchinado.
Te pasas toda la vida en este antro para que luego te echen a la puta calle en pelotas. Es así la movida, estamos todos bien jodidos con la hipoteca, la suegra y ahora el paro que aumenta y el Athletic que baja a segunda planta, pero cómodamente, en un ascensor plateado con detalles de ébano. Un proyecto llevado a cabo por Sir Arthur Levitey, de los Levitey de toda la vida.
Los rododendros se amotinan en la fábrica de cerveza de al lado y los gladiolos se van a la playa con paraguas para viejas y microcéfalos, y setas para hacer una buena sopa. Dicen que se ha puesto de moda en Taiwan. Le echas fetos de focas maltratadas y esperma de gorila en vías de extinción y te sale un caldo que está de muerte, con sus fideítos y todo, con sabor a fiambre descompuesto por la hiriente temperatura que a esas horas ataca desde todos los puntos cardinales de la estrella de los vientos cuando se mueve sobre la risa de la Mona Lisa, que sube a su vehículo de tres ruedas, escapa entre la nube del monóxido de carbono del tráfico y desaparece para siempre.
No desaparezcas para siempre, loco Tommy.